sábado, 11 de junio de 2016

Recordando los años de Oro Villarrealinos

¿Qué tienen en común la Universidad Nacional Federico Villarreal y la Selección brasileña de fútbol? Simple, ambas son pentacampeonas. Así es, aunque bien se debe aclarar que en distintos deportes, pero pentacampeonas al fin.

Cinco galardones como Campeones Universitarios de Atletismo, tricampeones  en Básquet, bicampeones en Tiro y Voleibol; son muy poco conocidos entre los estudiantes. Esto se debe que nuestra “Villa” a lo largo de estos últimos años se ha vuelto sinónimo de “huelgas”, “cierre de locales” y sobre todo de “no clases”. Sin embargo nuestra universidad guarda muchos secretos en sus 53 años de fundación sobre todo en el plano deportivo, como ya se habrán dado cuenta.

El año clave fue el de 1970. Hasta entonces la “Villa” no contaba con un organismo responsable de las actividades deportivas por eso se crea la Sección de Recreación, Educación Física y Deportes. Su primera oficina fue ubicada en el Local Central (Anexo 10) al costado de la Caja Central de la Universidad y se implementó un gimnasio de tamaño humilde y con material de los profesores de ese entonces. Luego sería trasladado al local de Colonial en el área donde en la actualidad se encuentra la Facultad de Ingeniería Industrial.

Los Años Dorados. Desde 1971 hasta el 73 la “Villa” cobró un inusitado auge deportivo en gran número de disciplinas, aún en aquellas consideradas de poca difusión en el ámbito universitario, como el ciclismo, esgrima y el tiro que le permitió situarse en una expectante posición de liderazgo ante el consenso universitario y nacional.

¿Cuál fue la clave para el éxito de nuestra universidad? Una buena organización. Desde 1970 a 1975 fueron incorporándose profesores y técnicos de diversas especialidades, incrementándose progresivamente hasta llegar al número de 14 especialistas. Esto permitió el gran desenvolvimiento de nuestros deportistas en las diversas disciplinas.

A nivel nacional se logró acceder a las diversas ligas comenzando en las divisiones inferiores, escalando hasta las divisiones superiores como la Liga de Fútbol de Miraflores, Liga Masculina de Básquetbol de Lima, Liga Metropolitana Masculina de Voleibol, Liga Femenina de Básquetbol de Lima, Liga de Tenis de Mesa de Lima, Liga Metropolitana de Ajedrez y la Liga Metropolitana de Atletismo.

Pero ahí no quedó todo. Nuestras brillantes campañas en competiciones internacionales en disciplinas como el básquet masculino realizada en Buenos Aires, Córdova y Mendoza, y Santiago de Chile, venciendo en 6 de los 7 partidos que jugaron (setiembre, 1972) y la del Equipo Masculino de Voleibol, afiliado a la liga de Lima, que en merito a haber obtenido el campeonato fuera designado para representar al Perú en el Torneo Sudamericano De Campeones, realizado en Curitiba (Brasil), alcanzando un honroso tercer lugar (octubre 1973).

Decadencia y Actualidad. Todo lo que sube en algún momento tiene que bajar. Y la “Villa” no fue ajena a esta frase. Con la la “era de las comisiones de reorganización y gobierno” en 1974 el proceso fue bruscamente frenado con el recorte absoluto de los recursos económicos y el recorte sistemático de los recursos humanos técnicos y de apoyo, no haciéndose esperar las consecuencias.

El lapso de 1974 a 1977, de inocultable recesión deportiva, Villarreal dejó de ser potencia deportiva a medida que nuestros equipos afiliados, por el éxodo masivo de sus mejores deportistas a otras instituciones que les ofrecían las facilidades y apoyo que la universidad ya no podía, o no quería, fueron perdiendo posiciones en la clasificación, descendiendo uno a uno de la primera división a la última categoría, llegándose algunos, inclusive, a perder la afiliación.

Luego de muchas destituciones, resoluciones y mandatos de diversas comisiones educativas no se llegaría a una “paz” hasta 1982 donde el Departamento de Educación Física, Recreación y Deportes se trasladaría al local de la avenida La Marina (Anexo 13) y sus oficinas se ubicaban en lo que hoy son las oficinas de Logísticas. De ahí en adelante solo se realizarían más resoluciones que solo tendrían que ver con la pertenencia del departamento y su transformación al Instituto de Recreación, Educación Física y Deporte.

La “Villa” no solo es sinónimos de “huelgas” o de “cierre de locales” como ya lo hemos visto. También ha sido generadora de logros importantes en el ámbito deportivo, solo depende de nosotros seguir apoyando a las diversas comisiones deportivas que existen y devolver a nuestra casa de estudios la gloria que alguna vez tuvo.

jueves, 9 de junio de 2016

EL RELOJ DE LA VILLA

Anexo10

El reloj de la Villarreal no da la hora. Da pena.¿Quién podría pensar que su valor  sobrepasa los 10 mil soles ventajosamente?. Con más de 100 años de vida, mucho antes de que las estructuras del colegio Inmaculada pasara a formar parte de la universidad,se ha convertido en una reliquia olvidada por el paso del tiempo.
Desde el pabellón D,mira fijamente el quehacer diario de los alumnos. Pasa desapercibido ante la mirada ajena de los transeúntes que ni lo conocen. Frente al busto de Federico Villarreal. Sus manecillas señalan un 12:20 eterno,quizá un momento memorable fuera ese, en el que valió la pena quedarse inmóvil y no volver a funcionar jamás.
El reloj ha visto fundarse a la universidad,ensaya el profesor de historia Victor Peralta, juzgando la estructura del pabellón en el que se encuentra.El bloque A y D formaban el colegio ,&el reloj debe ser de la época de la enseñanza de los curas.
Nadie coincide en cuando dejó de funcionar, o es mejor decir,  nadie lo ha visto funcionando,Quizá si .Lo innegable es que ninguna autoridad hizo nada por arreglarlo y sigue así. El reloj de la universidad villarreal da pena, no da la hora.
Existen pocos lugares en Lima que arreglan relojes tan antiguos,uno de ellos es el Olimpo.El jefe de la escuela de comunicaciones y profesor Victor Arbaiza, recuerda que cuando él hacía planes para fundar dicha escuela el reloj ya no funcionaba.Arreglarlo costaría entre 2000 a 10000 soles, comenta uno de los técnicos de la relojeria,una cifra que parece impagable para una Universidad Nacional golpeada por sus autoridades.
El reloj de la villa seguirá  atento como un adorno que nadie hace caso. Sabiendo esperar como hasta ahora lo ha hecho,hay cosas que nos compete a todos, por suerte por el reloj no pasan las horas. Sigue en sus 12:20 eterno.